La inteligencia artificial es un concepto de tecnología innovadora, evoluciona continua y rápidamente combinando la ciencia de la computación con el manejo de información obtenida a través de algoritmos representativos de las matemáticas e informática.
El propósito es crear maquinas o tecnología emergente que pueda emular características y capacidades del ser humano, tales como: el comportamiento, el pensamiento y razonamiento con el objetivo primordial de optimizar la vida humana.
Alan Turing, científico para la década del 1950 afirmaba que la Inteligencia Artificial existiría hasta que el ser humano no fuera capaz de discernir entre la inteligencia natural y la “inteligencia artificial”. El término de Inteligencia Artificial se oficializó en el 1956 y su propulsor fue el informático John McCarthy.
¿Está usted de acuerdo con la creencia de Turing? ¿Piensa que algún día la Inteligencia Artificial podría superar la natural? Hoy no lo sabemos, pero si de algo estamos seguros es que aun falta mucho por andar; sin embargo, aunque esta tecnología nos resulte algo preocupante por sus posibles implicaciones futuras su aplicación forma parte constante de nuestro día a día desde hace varios años.
Actualmente se han definido cuatro tipos de Inteligencia Artificial (IA):
1. Sistemas de información que piensan como seres humanos: imitan el detalle del pensamiento humano, es un tipo de inteligencia cognitiva computarizada que asiste entre otros en el aprendizaje, la toma de decisiones y la identificación y resolución de problemas.
Ejemplo: IBM, conocida como el gigante azul, desarrolló a SUMMIT, la “super computadora científica más poderosa e inteligente del mundo” la misma es capaz de procesar 200 cuatrillones de cálculos por segundo y tiene 250 petabytes de capacidad de almacenamiento.
2. Sistemas de información que actúan como seres humanos: imitan el comportamiento físico del ser humano como movimientos y gestos. Ejemplo: El Robot Sofia y su hermano: https://www.youtube.com/watch?v=XReaTqdY0fo
3. Sistemas de información que piensan racionalmente: estos sistemas son diseñados con el propósito de que puedan pensar de manera lógica como el cerebro humano. Continuamente se trabaja en el desarrollo de tecnología que pueda percibir y razonar de acuerdo con la situación o el entorno.
4. Sistemas de información que actúan racionalmente: continuamente se trabaja en el desarrollo de tecnología que pueda razonar y actuar de acuerdo con las circunstancias imitando el cerebro humano.
Algunos ejemplos sencillos de tecnología de IA que utilizamos en nuestro día a día lo son:
El Internet, Siri, Alexa, chatbots, Touch ID o huella digital de nuestros teléfonos inteligentes
La evolución en la tecnología de Inteligencia Artificial continúa impulsando el uso del “Big Data”, esta ayuda a los negocios a analizar grandes volúmenes de data obtenida a través de diferentes medios con el propósito de obtener información que lleve a mejorar la toma de decisiones y a establecer nuevas estrategias organizacionales.
La tecnología de inteligencia artificial desde hace muchos años a comenzando a cambiar el mundo y se espera que según pasen los años el desarrollo más avanzado de la misma pueda permitirle al ser humano lograr hacer cosas maravillosas que jamás hubiéramos pensado pudiéramos alcanzar.
Actualmente más compañías a nivel mundial han comenzado a evaluar el concepto de felicidad laboral con más seriedad y detenimiento. Desde hace varios años en algunos países mas que en otros empresarios y ejecutivos de grandes empresas han comenzado a diseñar y continuamente implementar estrategias dirigidas a lograr una mayor satisfacción laboral en sus empleados, esta iniciativa no solo provee grandes beneficios para los empleados, sino que también para la empresa.
¿A que nos referimos realmente cuando hablamos de Felicidad Laboral?
Nos referimos a los sentimientos, estado de ánimo y estamina que genera nuestro cuerpo al momento de prepararnos para ir a laboral, mientras estamos en nuestro trabajo o cuando nos preparamos para un proceso de entrevista para una compañía que entendemos es nuestra mejor opción.
Es claro que el concepto de Felicidad Laboral indica que estamos contentos, motivados, felices de trabajar en una compañía que cumple con nuestras expectativas ya que en ella pasamos la mayor parte de nuestro día.
Según algunos estudios realizados por varias compañías internacionales y la información que hemos obtenido como resultado de nuestras propias evaluaciones se ha demostrado que existen algunos factores en común que los empleados consideran los más importantes para lograr una mayor satisfacción laboral, veamos y evaluemos algunos de estos: (no se encuentran en orden de importancia)
a. Condiciones laborales de la empresa
Infraestructura, limpieza, seguridad, iluminación
b. Oportunidades de desarrollo profesional
Adiestramientos, plan de desarrollo y sucesión, certificaciones
c. Rentabilidad y vanguardismo de la empresa en que trabajan
Innovación, servicio, calidad, excelencia operacional
d. Competencias Administrativas y Gerenciales
Liderazgo, empatía, iniciativa, inteligencia emocional, visión estratégica
e. Requisitos y Responsabilidades del Puesto
Preparación académica, experiencia laboral, definición clara de responsabilidades
Otros:
f. Competitividad Salarial
Salarios justos y competitivos según el mercado
g. Beneficios Marginales
Seguro médico, bonificaciones, membrecías
h. Horarios flexibles
Es claro que existen factores más allá de lo económico que impactan positivamente a los empleados de las diferentes empresas, esto no significa que lo económico no es un factor importante, sin embargo; según los diferentes estudios realizados la compensación económica, ni los beneficios marginales que un empleador pueda ofrecer son los responsables en su totalidad de la felicidad laboral del empleado.
Un empleado con un buen salario y excelentes beneficios, pero laborando en un ambiente donde las condiciones laborales no son óptimas, donde los jefes y administrativos no tienen la preparación profesional o las competencias necesarias para ejercer efectivamente sus roles de supervisión y liderazgo, donde no existen oportunidades de desarrollo, donde la competencia y falta de compañerismo es la orden del día, donde la falta de calidad o servicio al cliente no es óptima, donde el llamado a la re estructuración organizacional por falta de capacidad económica es la nueva meta, definitivamente NO es un empleado feliz.
El lugar donde invierte la mayor parte de su día es un ambiente que genera estrés y desmotivación lo cual podría resultar en problemas de salud física y mental en los empleados, falta de eficiencia y productividad en su ejecutoria entre otras.
Estos resultados están directamente relacionados al aumento de gastos operacionales en la organización por falta de calidad e innovación en productos manufacturados y servicios, falta de productividad y eficiencia de los recursos, aumento de costos en los beneficios tales como seguros médicos entre otros.
En fin, para obtener grandes beneficios operacionales no siempre necesitamos invertir grandes cantidades de dinero, solo debemos evaluar con detenimiento la organización para identificar áreas de oportunidades costo efectivas que puedan incrementar sustancialmente la felicidad laboral de nuestro mayor recurso, el recurso Humano.
El Concepto de Felicidad Laboral podría ser una nueva estrategia organizacional para su empresa que resultaría en grandes beneficios económicos. Empresas tales como Facebook, Twitter, Google entre muchas otras han tomado este concepto con gran seriedad y han logrado sobresalir ante muchas otras.
Si interesa conocer como podría comenzar a realizar pequeños cambios con excelentes resultados no dude en comunicarse con nuestro equipo de trabajo para asistirle con el desarrollo e implementación de una nueva estrategia organizacional.
¡Creemos en hacer la diferencia!
¿Quieres mejorar tu productividad?
Aquí te presentamos algunos hábitos de personas con grandes responsabilidades laborales y quienes han aprendido a establecer un orden que luego crean en hábito para lograr ser más productivos.
a. Se levantan rápidamente, no presionan el botón del despertador varias veces.
b. Se ejercitan diariamente.
c. Toman café o agua al levantarse y se desayunan propiamente.
d. No leen ni envían emails largos, educan a sus empleados a escribir estratégicamente.
e. Utilizan la tecnología para que trabaje para ellos, estas facilitan sus agendas y calendarios entre otros: ALEXA, Google’s Assistant, Siri, smartphones.
f. Preparan un “checklist” la noche anterior de las tareas a completar el próximo día.
g. Durante el fin de semana preparan la agenda de la semana.
h. Llaman a diario o semanalmente a su familia inmediata, en las mañanas o en las noches antes de acostarse, de esta manera minimizan imprevistos.
i. Coordinan compartir con su familia y socializar con amistades fuera del ámbito laboral al menos una vez cada dos semanas, es clave para la felicidad y evita la depresión.
j. Establecen la regla de 20/40. Toda reunión laboral debe reducirse de 30 a 20 minutos y de 60 a 40 minutos con mucha disciplina.
k. Reducen el tiempo que invierten mirando la televisión.
l. Descansan entre 6 a 8 horas diarias.
Estos son algunos de los hábitos que podemos adaptar para ser mas productivos en nuestro trabajo y en nuestra vida diaria. Si comenzamos realizando pequeños cambios, pronto veremos como nuestra productividad va mejorando, trayendo como resultado grandes beneficios y oportunidades en el trabajo y en la vida diaria.
“Wake Up Call”: Productividad vs. Eficiencia
Dos métricas necesarias para dirigir cualquier organización al éxito.
¿Alguna vez te has fijado que en ocasiones cuando las cosas no andan bien es que buscas apoyo a tu alrededor y alternativas para solucionar o aliviar el problema, a veces pidiendo que ocurra un milagro o actuando como jamás lo habías hecho, logrando mantener un enfoque total para lograr tu objetivo de manera exitosa en un corto periodo de tiempo? Como humanos todos en algún momento hemos hecho lo mismo.
Lo mismo ocurre en las empresas, muchos empleados, gerentes, directores o empresarios actúan de igual forma en tiempos de crisis financiera, no es hasta que comienzan a experimentar el impacto económico, que sienten la necesidad desesperada de buscar alternativas para reducir costos, mejorar la calidad y generar más ingresos manteniendo un gran enfoque en lograr el objetivo lo antes posible y de la mejor manera.
Es en ese instante cuando deciden comenzar a implementar sistemas de métricas organizacionales y evaluar metodologías de transformación y mejoramiento continuo, metodologías y herramientas que por diversas razones nunca han formado parte de la lista de prioridades dentro de la organización pero que siempre han estado a su disponibilidad. Lamentablemente en ocasiones ya es demasiado tarde.
Es por esta razón que toda organización pública o privada, con o sin fines de lucro debe implementar una cultura de transformación, de números o mejoramiento continuo desde el comienzo de sus operaciones para añadir Valor a su organización y evadir la posibilidad de experimentar una crisis financiera la cual puede ocurrir por múltiples causas no solo porque el país experimenta una crisis económica.
Existen dos métricas organizacionales entre otras que son base en la implementación de una cultura de transformación o mejoramiento continuo, estas son PRODUCTIVIDAD Y EFICIENCIA, dos palabras que probablemente un gran porciento de la población a escuchado a través de sus vidas, aunque no todos sepan realmente su definición o propósito.
Hoy les ayudamos a entender su definición y propósito tomando en consideración que existen varias formas de definir las mismas dependiendo del tipo de empresa.
Productividad es un valor o indicador calculado donde dividimos el total de los productos completados entiéndase productos o servicios que generamos en un tiempo pre determinado, entre el valor calculado correspondiente a los insumos que utilizamos para realizar los mismos (recursos humanos, materiales, facilidad, utilidades, maquinarias, etc.) Mientras más productiva es una empresa, mayor rentabilidad poseerá la misma.
¿Cuán productiva es nuestra empresa o somos como empleados? Esto depende de cuán comprometidos estamos con el crecimiento organizacional y cuán eficientemente utilizamos los recursos necesarios para garantizar la entrega de nuestros productos o servicios en un tiempo determinado y con la mejor calidad.
La eficiencia está totalmente asociada con la productividad y el tiempo. La eficiencia se mide en base a la capacidad que poseemos para realizar tareas que añaden Valor al cliente. Esto implica tareas o procesos que no generan desperdicios operacionales, que resultan en un producto o servicio de alta calidad y que maximizan la capacidad intelectual y destrezas de sus recursos humanos, en adición consideramos la optimización de la utilización de las facilidades, equipos, materiales y utilidades entre otros.
El valor obtenido cuando calculamos la productividad de nuestra empresa demuestra cuan óptimos o eficientes son nuestros procesos y recursos y como consecuencia es un indicativo de cuán rentable es la misma.
Una organización que mantiene o adopta una cultura de mejoramiento continuo es una organización que no solo tiene como prioridad generar ingresos operacionales a través de la ganancia generada por las ventas de sus productos y servicios, sino que en adición mantiene un gran enfoque en generar ingresos teniendo una operación mucho más eficiente. Si consideramos que los ingresos operacionales son equivalentes a las ganancias menos los gastos, entonces debemos entender que los ingresos operacionales aumentan cuando reducimos gastos y esto ocurre cuando manejamos una organización eficiente.
La productividad y la eficiencia están asociadas y ambas métricas son claves para el crecimiento operacional de las empresas.
